Revolviendo las cosas guardadas de mi madre, encontré un retrato de mis abuelos maternos, a diferencia de mis otros abuelos, estos españoles. Se lo pedí sin dudarlo, pensando en colgarlo en casa para lucirlo. Me gusta mucho el marco que tiene y por sobre todas las cosas porque forma parte de mi historia.
También seleccioné unas cuantas fotos del álbum de casados de
mis padres, que está lleno de fotos en blanco y negro; pensando también en
conseguirles un bello marco para ellas, estas pertenecen al Río Baradero.
Y esta foto pertence a la quinta de mi abuela en la ciudad de Bólivar. Si habré corrido por su alrededor... Hoy ya sólo es pasado y recuerdos... los nuevos dueños al comprarla la derrivaron, quedando sólo escombros.
Otra parte de mi familia, proviene de Portugal, mis abuelos
paternos, (gran historia hay detrás de ellos, se podría escribir un estupendo
libro, o una novela con ella), y con ellos la virgen de Fátima. Veía como mi
abuela tenía una imagen de ella en una hermosa cajita de madera vidriada. Hace
poco, mi padre me dio algo que había conservado por años, algo realmente
importante, con gran valor religioso. Encantada recibí ese maravilloso regalo;
dos pequeñas hojitas, del árbol donde se apareció la virgen de Fátima. Mi tío
abuelo, sacerdote, en décadas pasadas,
lo custodiaba.
Caminando, me detuve frente a una vidriera, sin
llamarme nada la atención entré igual; de vez en cuando compro algo allí. Pero
esta vez una estatua de la virgen de Fátima me llamó la atención en una
góndola, y a su lado otra de Jesús. No dudé en traerme ambas a casa, y de
inmediato las pinté de blanco. Ahora sí
tengo mi propia virgen.
Gracias por pasar a visitarme. Un gran beso a todas♥